Muchos viñedos están trabajando en proyectos alternativos tras comprobar que la utilización de cañones anti granizo no han logrado evitar los recurrentes daños por tormentas en diversas locaciones.

Hasta 5.000 hectáreas de viñedos a través de la Borgoña suelen verse afectadas por las lluvias con granizo. Apenas un 30% de los productores de la región cuentas con pólizas de seguros que ayudarles a cubrir los daños, Muchos viticultores han pedido apoyo financiero al gobierno.
Las redes anti granizo han sido empleadas eficazmente en algunas otras regiones vinícolas, especialmente en áreas como Mendoza, Argentina, muy propensa al granizo. Sin embargo, hay preocupaciones de que las redes de malla estrecha puedan bloquear una cantidad crucial de sol.

“¿Dejaremos colocadas las redes durante todo el período de peligro (varios meses), lo cual podría tener un efecto adverso sobre el microclima? ¿O se debería extender las redes apresuradamente cada vez que el pronóstico del tiempo amenace? “
Pero, puede ser demasiado tarde para aliviar las preocupaciones sobre los suministros de vino de algunas de las áreas más afectadas. “Hemos perdido el equivalente a dos cosechas en los últimos tres años”, son testimonios desoladores de los productores vinícolas.
